jueves, 18 de agosto de 2011

¿El inicio de la decadencia de un área natural?





Me permito utilizar una foto de Mario A. Juárez, tomada de Flickr, para ilustrar este tema ya que no cuento por ahora con fotografías propias. Como se puede observar en ella, parece ser que a algún funcionario municipal con exceso de iniciativa se le ha ocurrido levantar esa especie de cabaña, tenderete o changarro en la ribera del río que forma el Salto de la Concepción y casi en el punto en el que se forma éste. La finalidad de esta construcción aparentemente de madera y de carácter (esperamos, deseamos, suplicamos) provisional nos es desconocida. ¿Será una caseta de información? ¿Una tienda? ¿Baños públicos?



Lo cierto es que esta construcción arruina el paisaje del Salto en lo que es (era) precisamente el más fotogénico de sus ángulos. Ahora, todo visitante que intente fotografiar la imponente cascada tendrá que incluir la nueva casucha, a menos que recurra (y muchos recurrirán, sin duda) al Photoshop. Apenas podemos creer que el Ayuntamiento de Aculco no se haya percatado del grave error que significa edificar esa construcción tan desangelada casi al borde de esta maravilla natural, no sólo por los valores paisajísticos que deberían priorizarse en un reclamo turístico tan valioso como éste, sino por el daño que seguramente han causado sus cimientos en las columnas basálticas del cauce que -parecen no saberlo- es de propiedad federal, cuando una de las prioridades de las autoridades medioambientales de todos los niveles en los años recientes ha sido preservar esos cauces libres de invasiones de todo tipo.



Ya antes habíamos hablado del daño que estaba causando al paisaje de este importante sitio natural y turístico la extracción de piedra en sus inmediaciones, pero esta vez se trata de un atentado directo contra el atractivo central del Cañón de Aculco, la más importante de sus cascadas.



Hacemos un atento llamado a las autoridades municipales para que retirne este adefesio. Si bien es cierto que la llegada cada vez mayor de turistas, especialmente aquellos que practican la escalada en roca, va haciendo necesaria la incorporación de algunos servicios, siempre deberá hacerse con respeto al sitio, lo que en definitiva no ocurrió en este caso. Es el tipo de contaminación visual que debe evitarse a toda costa. De otra manera, lo único que veremos en los años siguientes será la decadencia de este bello lugar.