La Danza de las Pastoras es un baile típico que se puede hallar en muchos pueblos indígenas y campesinos del Estado de México, especialmente entre los de las regiones otomí y mazahua. Su presencia no se limita, sin embargo, a estas zonas y etnias, pues en lugares como Puebla, Oaxaca, la ciudad de México y la tierra caliente de Michoacán se ejecuta también de manera tradicional.
El origen de esta danza parece hallarse en los tiempos de la evangelización franciscana, cuando en las representaciones dramáticas de época navideña (que con el tiempo se convirtieron las pastorelas) aparecían precisamente grupos de pastores que participaban en el drama siendo tentados por el diablo para pecar y no acudir a Belén a adorar al Niño Jesús, ejecutando en el curso de la pieza canciones y bailes. Con el tiempo, la Danza de las Pastoras habría cobrado personalidad propia, separada de las pastorelas, pero conservando su intención religiosa aunque ya no ligada estrictamente con la Navidad. Con todo, es posible que subsistan en ella elementos sincréticos, producto de la fusión con antiguas tradiciones prehispánicas.
En el caso de Aculco, la Danza de las Pastoras se ejecuta con características propias en lugares como Santiago Oxthoc Toxhié y El Azafrán. Gracias a la información y fotografías que me envía Brayan Ezquivel Villedo y que aquí transcribo podemos saber un poco más sobre el baile en este último sitio, situado como saben a orillas de la Presa de Huapango:
Fue hace muchos años muy ejecutada por nuestros abuelos al ritmo del violín y del tambor, donde danzaban a los santos en sus festividades y se fue heredando de generación en generación desde niñas hasta ancianas. Y es una danza que auun se realiza con cantos en el dialecto, oraciones y rituales que engalanan la fiesta de la comunidad y otras festividades religiosas, donde mujeres se atavían con sus mejores trajes elaborados por ellas mismas para ejecutar la danza.
Los pasos de la danza representan un telar de cintura, donde la cabeza o las mujeres que inician las evoluciones son las agujas que empiezan a urdir el tejido; son 24 piezas de diferente tejido, pero la misma evolución. Se dice que si cada una de ellas tuviera un hilo jalando, al final quedaría una faja con una rosa en el centro.
La danza se inició hace muchos años, ya que decían que los antepasados se la ofrecían a la Madre Tierra y a los cuatro elementos. De hecho, aun se ejecutan ceremonias donde se le pide el permiso a la tierra y a los antepasados para poder danzar, pero con la Conquista se fue ejecutando para los santos y en las festividades de ellos, quedando como patrón de la danza de pastoras el Señor de Chalma ya que lo bailan mujeres otomíes y mazahuas.
La danza consta de 24 piezas cada una, con su son al ritmo del violín y del tambor, así como su alabanza (algunas en español y otras en otomí o hay algunas que van revueltas ya que se canta en los dos idiomas). Existen más alabanzas como la de el arrullo El permiso, el paseo, el engrosamiento a las imágenes y las coronaciones, así como los cambios de los cargueros. El número es indeterminado, pero para formar una danza completa es de 24 mujeres entre ellas las mayores, las maestras de danza y alabanza, las paradas y los basarios y sólo las que se dedican a danzar, ya que las antes mencionadas son las que traen el cargo de los santos
El traje que se utiliza en su mayoría es elaborado por ellas mismas, desde los bordados hasta el corte y tejido de la tela, el bastón de palo de encino con sus cascabeles y los listones en representación de la lluvia. El sombrero lo utilizan porque son mujeres indígenas, ataviado de flores y tiras brillantes en representación de la tierra las flores, y el arco en representación del sol y la luna. El traje es blanco en símbolo de pureza y el delantal va cambiando según el santo, pero los más importantes son el rosa para la Virgen María y azul para los santos hombres, el morado para el Santo Niño así como el luto.
En la actualidad se danza conforme al calendario religioso: lo marca dando paso el día importante a la fiesta del santo patrón, Santa Rosa de Lima patrona de la comunidad.
Aculco fue un lugar de tradiciones y cultura. Y es una aculco lleno de tesoros tango tangibles como intangibles.
¡Muchísimas gracias, Brayan, por la información y la fotografías!
uwu
ResponderEliminar